lunes, 16 de mayo de 2011

CEESP pide reforzar la propiedad intelectual

Lunes 02 de mayo de 2011 Eduardo Camacho | El Universal
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eduardo.camacho@eluniversal.com.mxMéxico debe fomentar y fortalecer la propiedad intelectual, que protege el conocimiento y se traduce en innovación tecnológica, fundamental para el desarrollo económico y la creación de riqueza, aseguró el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP). “La innovación tecnológica es un factor fundamental en el proceso de crecimiento de cualquier economía, pero México no muestra avances importantes en esta materia y, eso limita lograr un ritmo de crecimiento elevado y sostenido”, agregó el organismo.
La instancia de investigación adscrita al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) que preside Mario Sánchez, explicó que el nivel de inversión es determinante, pero México sólo destina menos de medio punto porcentual del Producto Interno Bruto (PIB) a este rubro.
Lo anterior ubica a nuestro país en los niveles más bajos de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). En el desempeño de la economía, los activos tangibles como la mano de obra y el capital son factores importantes pero en la economía mundial, los activos intangibles como la información, la creatividad y la innovación, ganan terreno en la incidencia sobre el proceso de crecimiento y bienestar social”.
Subrayó que la poca inversión puede estar relacionada con el reducido número de patentes que se registran en comparación con otros países que consideran el cambio tecnológico como prioritario en su proceso de desarrollo económico.
Las patentes
Según el reporte del primer trimestre de 2011 del Instituto Mexicano de Propiedad Intelectual (IMPI), en ese lapso se otorgaron sólo 54 patentes en nuestro país, mientras que en EU fueron mil 410, en Alemania 234, en Suiza 174 y 142 en Japón.
Instó a contar con un marco jurídico claro y eficiente en la materia, ya que el tiempo promedio que tarda el trámite de una patente, desde que ingresa la solicitud hasta que se emite el dictamen final, sea positivo o negativo, es de tres a cinco años.
Para un diseño industrial el tiempo promedio es de un año y para un modelo de utilidad de dos años.
El CEESP agregó que se debe adoptar el cambio tecnológico que haga más competitivo nuestro aparato productivo para propiciar que la capacitación de todos los trabajadores se incremente, con una consecuente mejora en su nivel de vida.
“De retrasar los ajustes necesarios, tanto fiscales, laborales y legales para fortalecer el desarrollo del país, se estaría condenando a la población a seguir inmersa en un ambiente de elevada pobreza y pocos incentivos para lograra un mejor nivel de vida”, concluyó el organismo.

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